Olivari

Olivari colaboró no sólo con Gio Ponti y Rodolfo Dordoni, sino también con arquitectos de la altura de Franco Albini, Ignazio Gardella, Angelo Mangiarotti, Caccia Dominioni y BBPR.

Dichos diseñadores idearon manillas con una gran estética expresamente para sus construcciones, que posteriormente permanecieron en el catálogo de Olivari y algunas de las cuales continúan produciéndose hasta la fecha.

En Olivari, el trabajo es un auténtico bien de la empresa, fundado en un sólido respeto mutuo y basado tanto en la exigencia como en el reconocimiento de los valores y las capacidades de cada uno.

A partir de barras de latón, las asas se marcan con láser, se mecanizan, se pulen y se croman. También se moldean y ensamblan en la propia fábrica todos los componentes técnicos, bien sean de resina o de chapa.

Cada fase del ciclo de producción implica rigurosos controles para garantizar una continuidad de la calidad a lo largo del tiempo.

Objetos aparentemente sencillos, que se esconden tras la delicadeza de la precisión más absoluta. Una precisión que a menudo ni tan siquiera las más modernas máquinas pueden ofrecer, y que solo un ojo capacitado y minucioso puede aportar, ajustando, modificando y acompañando el cambio de los materiales y el deterioro de los equipos.

Olivari emplea las tecnologías más avanzadas, a la vez que conserva todo el trabajo de artesanía acumulado en cien años de historia y ha adquirido las certificaciones la certificación ISO 9001, para el Sistema de Gestión de la Fase de Diseño, y la certificación ISO 14000, para el Sistema de Gestión de la Protección del Medio Ambiente, que confirman el compromiso que la firma siempre ha perseguido para asegurar la calidad del producto, con pleno respeto al personal, al entorno y al territorio..

La fácil instalación de las manillas Olivari para puertas y ventanas y su sencilla capacidad de intercambio, coronan un trabajo bien hecho. Las manillas de Olivari son siempre el resultado de la estrecha colaboración entre una mente creativa y una mente técnico-tecnológica.

Gracias a su excelencia productiva y su actualidad estética. Muchas de sus manillas con el tiempo se han convertido en “clásicos” y son reconocidas y apreciadas como iconos del “Made in Italy”.